¿QUÉ
MÁS HA HECHO MESSI POR ARGENTINA?
En
torno al mundial, uno lee lo de siempre... aburrido y repetitivo. Pero descubrí
una joyita de anécdota en el Marca del domingo que dice así:
-
En uno de los
diálogos más desternillantes de La vida
de Brian, en una reunión del Frente Popular de Judea, alguien pregunta:”Bueno,
pero aparte del alcantarillado, la sanidad, la enseñanza, el vino, el orden
público, la irrigación, las carreteras y los baños públicos, ¿Qué han hecho los
romanos por nosotros?”. Messi es los
romanos y Judea es Argentina. Leo falló ayer el penalti y carga con las culpas
de una selección que es un desastre. Además de clasificar a Argentina, dar
lustre al equipo, ser el mejor jugador, ofrece un rendimiento superior a los
otros diez, llevarles a la final del mundial anterior, ganar un mundial sub20,
un oro olímpico, no nacionalizarse español y aguantar las impertinencias de
Maradona y su eterna comparación con él. ¿Qué más ha hecho Messi para
Argentina? Ah, fallar un penalti.
Esto
me hace recordar a lo que leí hace años de Arturo Jauretche en sus polémicas,
donde reflexionaba diciendo:
-
¿Te acordás lo del
arpa?
Así la contó
Discepolín:
-
Fuimos Pepe y yo al
circo. Y empezó el número de un equilibrista. Se subía a una escalera de punta,
y al llegar allá arriba ponía un banquito y encima un tarro de yerba. Despúes del
tarro, un asiento de bicicleta. Allí se snetaba él y mientras la escalera daba
vueltas sobre ella misma, este bárbaro hacía juegos malabares con tres botellas
en las manos... con los dos pies tocaba el arpa y claro, todos aplaudimos como
locos. ¡Fijate! Un número estupendo... Pero Pepe, movió la cabeza desdeñándolo.
¿Y sabés qué dijo? “Sí, bueno... pero el arpa no la toca bien”.
-
¿Y qué querías? ¿Un
concierto de la Wagneriana?
Después
de estas dos anécdotas, no leo más lo estríctamente futbolístico... sigo
considerando a los cronistas de fútbol, unos reverendos chatos y obtusos
energumenos, que todavía no entiendo porqué les pagan las empresas para decir
tonterías.
Todo
esto viene a consecuencia de que toda la Argentina futbolera fustiga de forma
virulenta y cobarde a Leonel Messi. Otros fanatizados con colores lo exaltan
valiendose de las mentiras más recalcitrantes, como ocurre en el diario SPORT
de Barcelona diciendo en la portada: ARGENTINA
ARROPA A MESSI. Obvio que es al revés... pero estos Catalanes...
Decía
Borges que el mayor inconveniente de Argentina, son los argentinos. Fue un
genio de la literatura, pero escribió y dijo muchas tonterías quizás por eso de
ser argentino.
Para
Alfonso Ussía, los argentinos le parecen unos seres privilegiados, que viven en
un país maravilloso, fronterizo con el milagro, y cuyo mayor defecto es la
verborrea convincente. Pero para mi, el argentino es una mixtura de
personalidades que hablan español con acento italiano y en el fondo, aspiran a
ser franceses o ingleses.
En
sus memorias cinegéticas, Eduardo Campo, decía:“nací en 1930, cuando Argentina era el granero del mundo, en su capital
Buenos Aires, que en aquel entonces era como París. Estudié en la Facultad de
Medicina de Buenos Aires, que era como la Sorbona (...), fui jefe de división
del Hospital Ramos Mejía de Buenos Aires, que era entonces como la Clínica Mayo
de EEUU. Me retiré en 2008 en una chacra (...) donde veo pasar la vida desde
una ventana y aprecio que esto ya no será jamás el granero del mundo, ni París,
ni la Sorbona, y la asistencia médica, como el resto de las cosas, se están
pareciendo mucho a Biafra gracias a los gobiernos populistas de los últimos
años. Argentina es una nación robada por ella misma, apasionada, bellísima,
culta y sorprendente. Todo lo bueno está en Argentina. Y mucho de lo malo,
también”.
Yo creo que Argentina tiene un Dios, Maradona. El futbolista más tramposo y menos ejemplar de la historia del fútbol. Tan importante que es el estafador que más aman los argentinos.
Lamentablemente
a mi me tocó una vez viajar con él, en el año 1984, cuando volvía de la lesión
que lo postró meses en cama. Nunca llegó a la altura de Messi en el Nou Camp...
